Es un debate que en los últimos años ha adquirido especial importancia. Empezó el 11 de septiembre de 2001 cuando, sin comerlo ni beberlo, un ataque de islamistas radicales acabó con la vida de 3.000 personas. La verdad es que nunca se me olvidará esa tarde, en la que probablemente gente de todo el mundo se estremecía mientras no podía despegar los ojos de la televisión.
Después de casi 12 años, nos encontramos ante la incertidumbre de si deberíamos "cruzarnos de acera" cuando vemos a alguien de aspecto musulmán. No podemos culpar ni tachar de racista este tipo de reacciones. No hacemos más que ver en los medios de comunicación como radicales islamistas matan a gente inocente "en el nombre de Alá". Está claro que, no todos los musulmanes son radicales y mucho menos asesinos, pero así es como funciona nuestro cerebro, es un mecanismo de defensa.
Por otro lado, dejando más a un lado el tema del radicalismo, a mí, especialmente como mujer que soy, el Islam (tal y como se practica en la mayoría de los países que lo procesan) me parece una creencia NO respetable. No es nada nuevo, todos sabemos que la mujer en los países musulmanes vale menos que una piedra. Y no hace falta irse a pueblos alejados de las capitales, pues en sitios como Qatar, Dubai o Abu-Dhabi, las mujeres son privadas de su dignidad. Sé que en España estábamos así en la Edad Media, pero hemos evolucionado. ¿Qué pasa con ellos? ¿Por qué no evolucionan? ¿Por qué siguen existiendo dictaduras radicalizadas? Y la pregunta del millón: ¿Qué podemos/debemos hacer al respecto?
La justificación que se ha dado a la invasión de Iraq y Afganistán es: Por "ayudar" a que consigan un sistema "justo" de gobierno. Pero ¿merece la pena todas las vidas que se han perdido? ¿Hasta qué punto somos responsables del bienestar de esta gente?
Mi respuesta, bastante comedida y no muy convincente para según quiénes, es que en efecto, somos humanos. Y como tal, tenemos la tendencia a intentar ayudarnos los unos a los otros. Sin embargo, ni creo ni apoyo ningún tipo de guerra, ya que siempre hay muertes inocentes como daño colateral. Sé que además, se puede iniciar una guerra bajo un pretexto muy noble pero que en realidad tiene otras metas (control del petróleo, ventas de armas...). Esto ya depende del nivel de escepticismo de cada uno. Por lo tanto, si alguien me preguntase ¿Apoyas la invasión de determinados países? Mi respuesta sería no, PERO.
Por último, volviendo al tema de antes, al de los radicales islamistas, ¿deberíamos culpar a las ideologías o religiones de las muertes que producen sus seguidores fanáticos? Aquí en España, conocemos muy bien el concepto de "asesinatos justificados por creencias". Si una persona es separatista, en principio y aunque no lo comparta, respeto su creencia. Sin embargo este respeto se pierde evidentemente, cuando lo utilizan como pretexto para matar. Esta gente que asesina, claramente tiene un desequilibrio mental alimentado y en parte justificado por los grupos radicales con los que se junta. Luego, al final lo que queda es que gente inestabe mentalmente se junta con un grupo radical (que probablemente se la traiga al pairo) que le permite asesinar "justificadamente" y encima ser recompensado y reconocido por ello.
Este texto más que ser una exposición de mi opinión (que me cuesta dar puesto que no encuentro un posicionamiento claro y convincente al respecto) es más bien una invitación a la reflexión sobre este tema tan polémico y que desgraciadamente, ocupa los titulares varias veces al mes.
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