jueves, 19 de abril de 2012

El miedo a la desigualdad



Todos no somos iguales, es decir, todos somos diferentes. Parece obvio pero a la gente le cuesta mucho entenderlo. Nos puede parecer justo o no, pero el caso es que las diferencias entre sujetos existen. Desde algo tan básico como el sexo, a cosas más elementales como la inteligencia o cualquier habilidad específica. 
Me comentaba un amigo: si dos personas que tienen el mismo trabajo con los mismos objetivos y una de ellas es menos inteligente que la otra, por ende, menos eficiente (es decir, invierte más horas de su tiempo) y obtiene el mismo resultado que el que es más inteligente, ¿debería recibir un extra por el tiempo invertido? Yo a esto respondo con un rotundo NO. Es muy sencillo: no todos valemos para lo mismo. Puede sonar arisco, pero es cierto. A mí nunca se me ocurriría ser pianista profesional. Yo toco el piano sí, y me esfuerzo mucho, pero nunca llegaré a tocar como Rajmáninov. ¿No deberíamos premiar al que lo hace mejor y no, precisamente castigarle por tener un don? 
No digo que no se deba valorar el esfuerzo de las personas, es muy loable. Pero al final lo que cuenta es la eficiencia y los resultados. Yo si tengo que poner a alguien de director de una empresa, no lo voy a hacer sólo porque se esfuerce mucho, lo voy a hacer porque sé que va a ser el más eficiente y el que mejor sepa resolver vicisitudes (es decir, el más inteligente y que por supuesto, sea trabajador). Pues lo mismo me vale uno poco inteligente que uno listo que no hace nada. Y que conste que cuando digo poco inteligente no me refiero a gente con déficit mental, me refiero a gente con un coeficiente dentro de la media pero inferior a la persona con la que estoy comparando todo el rato. Pongamos nombres: tenemos a Pepe y a Mario. Ambos han estudiado psicología y ambos trabajan en el departamento de recursos humanos. A los dos se les pide el mismo objetivo: manejo del personal contratado y selección del nuevo personal. Pepe tiene una muy buena visión y percepción de la personalidad de los candidatos y contratados, por lo que le resulta fácil distinguir a los que son válidos o no (digamos que tiene un don). Mario sin embargo, es un poco mas torpe para esto y necesita indagar más a fondo en la historia y currículum de cada candidato y contratado por lo que mientras Pepe está 4h, Mario está 7 para ambos obtener el mismo resultado. Y yo pregunto, llegado el momento ¿a quién cogerías como jefe del departamento de recursos humanos? Mi respuesta sería al más eficiente y que por supuesto haga bien su trabajo.
El ejemplo es para que veáis un poco por dónde quiero llevar mi argumentación. Creo que lo que hay que premiar es al que sobresale, sea por el motivo que sea. Si eres más inteligente, esa suerte que has tenido. En la vida hay desigualdades hay que aceptarlo. No todo el mundo puede ser todo en esta vida. No todos podemos hacer lo que queramos, porque chocamos contra las leyes de la naturaleza propias. Ni yo valgo para cantante ni el vecino para ser médico y todos tan anchos y felices. Lo que sí que tengo claro, es que las limitaciones deben ser las intrínsecas de uno mismo y no las desigualdades socio-económicas. Es decir, uno debería ser capaz de ser lo que quiera ser independientemente de que sea rico o pobre. De ahí que sea tan importante cuidar la educación pública. Pero insisto, si uno no tiene madera de algo, no la tiene. Es fisiológico y no se puede ni podrá cambiar.
Creo que una persona para sacar el mayor partido de sí misma, antes de saber qué puede hacer, ha de ser consciente de sus propias limitaciones. Eso es lo que yo considero una persona inteligente. Sabe atajar y adelantarse a lo que va a hacer peor, puesto que sabe que en ese terreno no se va a mover bien. No tiene la absurda esperanza de llegar a ser algo que nunca será por simple mediocridad. Puede que suene duro, puede que sea descorazonador pero es que me parece absurdo que mucha gente se crea que vive en una película Disney donde todo es posible y donde todos acabaremos cantando al son de la misma música. Joder, vivimos en el mundo real. Hay injusticias, sí bienvenido. Quizás me sea más fácil decir todo esto porque vivo en una casa de puta madre, estoy estudiando lo que quiero y básicamente tengo un futuro alentador. Pero eso no quiere decir que no lo sepa valorar, ni que sepa que, si hubiese nacido de otra manera (más tonta, más vaga) por mucho dinero o mucho que me quisesen  mis padres, no habría llegado a nada, porque "se nace, no se hace". Se puede perfeccionar, pero no se pueden cosechar peras de un olmo. Al menos es lo que decía mi abuela y la considero una mujer muy sabia...

viernes, 13 de abril de 2012

Forgiveness as forgetting someone.

I am starting to forget you. I don't think about you that much and it's supposed to be a good thing... Although I feel sad. It is funny how life puts you by accident in front of someone you'll never forget, without you even noticing, it becomes the one thing in your mind.
I was trying to hide it but now I'm trying to find it. It is stupid, I know... but today I woke up feeling a heavy heart, because I certainly wish you were here sometimes. Because when things weren't easy I liked to be able to rely on you.
But like everything I've ever known it will disappear one day, so I think it isn't even worth trying to hold on so tight. I might as well let it go.
I hate complexity and I hate simpleness, both of them can give me the worst headaches. It also bothers me to overanalyze everything this much. I can't feel any feeling without flailing it. Some people say that it's because I am intelligent... Well I disagree. I think it is more related to personality, which means that I've been raised to question absolutely everything I do, see, listen... or feel. I wasn't taught to overanalyze my feelings, but it just came along with the other stuff my parents told me to do in this life.
I do feel so much better when I am away. Maybe I should take off, grab a backpack and get the hell out of here. "Get lost so I can find my self" kind of bullshit... which I am starting to think is not such kind of thing.
I don't know why I am writing in English today. It might be the weather, who the fuck knows.

I feel numb.


jueves, 12 de abril de 2012

Soñar = Masoquismo


He descubierto la manera definitiva de autocastigo-masoquismo. Lo peor de todo es que ni siquiera lo podemos controlar. Es nuestro subconsciente el encargado de hacernos sufrir... eso es, mediante los sueños. Porque los sueños cuanto más maravillosos, más te destrozan al despertar. Porque eres capaz de sentir todo lo que tu mente coloca ahí para ti. Esa persona que está lejos y que hace tiempo que no ves, por fin la tienes contigo, en la misma habitación. Os podéis dar las manos. Os decís que os queréis y que nunca más os volveréis a separar. Un cuento de hadas que te da una ostia cuando abres los ojos.
Pero no es solo eso, es que cuando te despiertas, sigues teniendo los sentimientos evocados por el sueño, lo cual te confunde aún más. Me acabo de echar una siesta y he soñado con algo que llevo evitando algún que otro mes ya, y me he despertado sintiéndome como al principio, como si no hubiese evolucionado. 
¿Cómo se hace cuando el subconsciente te tira para atrás y tu mente consciente te dice que hay que seguir hacia delante?
Hay muchas teorías que defienden que el subconsciente es lo que realmente queremos. Yo tengo claro que es así, sin embargo también sé que "querer" no es sinónimo de "poder"... Por mucho que diga la canción de Diego Torres. Querer es sinónimo de frustración en muchos casos, sobre todo cuando se convierte en ansiar algo con más fuerzas que nada. Cuando acabas por pensar que tu vida perdería el sentido si no lo obtuvieses. Eso es obsesión. 
Entre eso y la presión social de que todo ha de ser superado para poder ser considerado "curado" creo que se comete un gran error. Yo creo que superar debería equivaler a aprender a vivir con algo. Yo tendría que aprender a vivir con el hecho de que siempre, pase lo que pase, me hubiese gustado tener la oportunidad de estar con esa persona que hoy se ha pasado por mis sueños, al igual que otros tendrán que aprender a vivir con otras cosas. ¿Lo mejor de todo? Que no puedo arrepentirme de nada, porque nunca hubo oportunidad, nunca estuvo allí. Y quizás eso me ayude a superar o a vivir con ello o a lo que coño signifique levantarme cada mañana e intentar no mirar hacia atrás, concentrándome mucho en ser feliz.

Y como no, un tópico que me viene a la cabeza cada vez que pienso en los sueños, el final de "La vida es sueño" de  Calderón de la Barca:

¿Qué es la vida? Un frenesí.
¿Qué es la vida? Una ficción,
una sombra, una ilusión,
y el mayor bien es pequeño;
que toda la vida es sueño,
y los sueños, sueños son.

martes, 3 de abril de 2012

A dos metros bajo tierra

Todas las cosas.
Todas las personas.
Todos los lugares.
Tienen su final.

He vuelto a terminar esta grandiosa serie. No puedo parar de llorar.

domingo, 1 de abril de 2012

La fórmula para vivir más tiempo

Si viviese en un mundo paralelo donde 1 año fuese como 30 años... ¿viviría más tiempo?