Las palabras están definitivamente sobrevaloradas y las miradas se pierden en la distancia. Caminamos firmes hacia nuestro destino sin detenernos a investigar qué es lo que ocurre a nuestro alrededor. Las calles llenas de gente dándose la mano, odiándose en secreto, mintiéndose.
Es increíble descubrir lo que esconde esa gente con tan sólo mirarles a la cara. Me dan ganas de temblar cuando con una mirada soy capaz de decirle algo a alguien, a veces "words just get in the way", como diría Richard Ashcroft. A veces simplemente es necesaria una sonrisa, una lágrima, una mueca, un silbido, un roce, una bofetada... y las palabras se hacen innecesarias. No importa cúanta labia tengas, no importa cuántas lenguas sepas hablar, hay cosas que son universales y comprensibles para todo el mundo. Hay sentimientos que se captan al vuelo sin que sean expresados en fonemas ni caligrafía.
Muchos me dicen que soy como un libro abierto, que se me ve todo en la cara. Yo lo considero una virtud. Valoro a la gente transparente. La gente inexpresiva puede engañarte más fácilmente. Esa gente que puede estar sintiendo lo contrario pero que por su propio beneficio simplemente lo ignora y no lo exterioriza. Me pregunto si algún día esa gente explotará, tal cual, sin dejar rastro. Quizás deberían...
Es increíble descubrir lo que esconde esa gente con tan sólo mirarles a la cara. Me dan ganas de temblar cuando con una mirada soy capaz de decirle algo a alguien, a veces "words just get in the way", como diría Richard Ashcroft. A veces simplemente es necesaria una sonrisa, una lágrima, una mueca, un silbido, un roce, una bofetada... y las palabras se hacen innecesarias. No importa cúanta labia tengas, no importa cuántas lenguas sepas hablar, hay cosas que son universales y comprensibles para todo el mundo. Hay sentimientos que se captan al vuelo sin que sean expresados en fonemas ni caligrafía.
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