Siempre presumí de independencia y autonomía. De ser poco romántica, de nunca saber reconocer mi debilidad. Sin embargo aquí estoy confesando que me alegro por fin de no decir te quieros vacíos. Salir a la calle y saber que no encontraré nada mejor, porque no lo hay, es imposible.
Si bien es cierto que mis pensamientos van una y otra vez a la chica que siempre he sido. A la que juró que jamás dependería emocionalmente de nadie, no hasta este punto. Sin embargo creo que puedo rectificar, seguir siendo la misma, pero con una visión distinta. Es verdad que por una parte asusta el saber que alguien tiene el poder de hacerte feliz o destrozarte, pero por otro lado reconforta el haber encontrado the one of your kind.
Me cuesta pensar que di mucho más por gente que ahora, evidentemente, nunca dio una mierda por mi. Así que a todos esos les digo que se vayan a comer girasoles, porque lo que es yo, SOY FELIZ y me sé de alguno que no lo será, porque le encanta compadecerse de sí mismo...
Si bien es cierto que mis pensamientos van una y otra vez a la chica que siempre he sido. A la que juró que jamás dependería emocionalmente de nadie, no hasta este punto. Sin embargo creo que puedo rectificar, seguir siendo la misma, pero con una visión distinta. Es verdad que por una parte asusta el saber que alguien tiene el poder de hacerte feliz o destrozarte, pero por otro lado reconforta el haber encontrado the one of your kind.
Me cuesta pensar que di mucho más por gente que ahora, evidentemente, nunca dio una mierda por mi. Así que a todos esos les digo que se vayan a comer girasoles, porque lo que es yo, SOY FELIZ y me sé de alguno que no lo será, porque le encanta compadecerse de sí mismo...
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