viernes, 14 de enero de 2011

No os pareis ante mi tumba a llorar...


No os pareis ante mi tumba para llorar,
porque ahí no me vais a encontrar.

Soy la fuerza del viento al soplar,
y la luz blanca al nevar.

Soy el sol sobre el maduro trigal,
soy la lluvia suave y otoñal.

No os pareis ante mi tumba para llorar,
porque ahí nunca parare a descansar.


2 comentarios:

  1. Preciosa poesía, la descubrí gracias a la serie de TV Mujeres Desesperadas.
    Gracias por publicarla.

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